De hace un tiempo a esta parte han ido apareciendo unas extrañas señales de tráfico por nuestra ciudad. Señales que vienen a poner en tela de juicio un poco más la labor de la DGT en los últimos tiempos, con un director que duplica al volante de su vehículo privado los límites permitidos de velocidad y que ahora difunde en señales regulatorias mensajes contra la inmigración. Ni que decir tiene que esperamos pronto se ponga fin a esta dinámica.